Como ya lo hemos mencionado, la noche es el momento donde nuestro cuerpo debe relajarse y desconectarse del movimiento y la conciencia.
En este nuevo capítulo de Tatiana en Casa quiero compartir una gran preocupación que me ha surgido a raíz de la cuarentena y es el tema del uso excesivo de la pantallas por nuestros hijos, relacionado con el Home School y la convivencia en nuestros hogares.
Los medios masivos producen un trastorno relevante del desarrollo anímico-espiritual en particular en los niños, pues los conduce a un mirar fijo y junto con esto a una disminución de la conciencia, cercana al trance.
El sano desarrollo de los niños y jóvenes es algo que depende del ejemplo que les demos como adultos que somos, siendo cercanos a ellos, comunicándonos y conociéndolos para así poder saber que les afecta y con la ayuda de profesionales en salud escolar, poder responder de manera efectiva para evitar que sufran problemas de aprendizaje que influyan de manera negativa en su sano desarrollo madurativo.
El niño del cuarto grado ha pasado por reconocer las formas a entenderlas.